El poder conductor de estas corrientes hace penetrar en la profundidad de la piel los ingredientes claves de las cremas, mejorar la circulación sanguínea y la hidratación.​

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El tratamiento consta de dos fases: ​

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- Ciclo de Pretratamiento: mientras se aplica el conductor
galvánico se usa un gel con carga eléctrica negativa. Esta cargas negativas hace que el gel penetre en la piel y se una a las impurezas en la profundidad de la piel.​

- Ciclo de Tratamiento: ahora el conductor galvánico y el gel de tratamiento tienen carga eléctrica positiva. Estas cargas positivas atraen a la superficie de la piel las impurezas atrapadas en la carga negativa del gel de Pretratamiento y a la vez favorece la penetración de las cremas​

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El tratamiento es indoloro y muy relajante, con efecto inmediato de una piel más luminosa y brillante Diversos estudios avalan que la piel está hasta un 70% más receptiva a los productos cosméticos en las 24 horas posteriores a un tratamiento con corriente galvánica.